¿Recuerdas tu juguete favorito de la infancia? Yo sí, era un cachorro de peluche que me acompañaba a todas partes.
Todos hemos tenido nuestro juguete favorito, y los niños de ahora también. Y frente a lo que tendemos a pensar, los juguetes favoritos de los pequeños de la casa no son los más sofisticados, en la mayoría de ocasiones su compañero favorito es un peluche.
Un peluche se puede convertir en ese compañero inseparable al que le pueden contar cosas y que les acompaña en sus aventuras o en sus horas de sueño.
Y es que los peluches son más de lo que realmente parecen. Los peluches bebes son esenciales para el crecimiento del bebe así como para su buena estimulación. Pero lo cierto es que debemos ir con mucho cuidado a la hora de elegir los juguetes correctos para las edades de nuestros pequeños.
¿Cómo elegir los mejores peluches para bebés?
- Una de las cosas más importantes es que elijas un peluche sin piezas pequeñas que se puedan soltar. Es muy probable que nuestro bebé se lleve el peluche a la boca y si tiene piezas pequeñas que se sueltan, como ojos de plástico, puede ser peligroso.
- El tamaño apropiado. Puede que te encanten los peluches gigantes, pero no son la mejor opción para que nuestros bebés jueguen con ellos. Los peluches gigantes son perfectos para decorar el cuarto del bebé, pero si quieres que sea su compañero inseparable debe tener un tamaño que pueda manejar.
- Mejor de pelo corto. Así no acumularán polvo ni habrá peligro de que nuestro pequeño le pueda arrancar el pelo y acabe tragándoselo.
- Colores cálidos y pastel. Este tipo de colores en sus peluches harán que el bebé se sienta más tranquilo. Aunque a medida que el niño va creciendo podemos ir eligiendo colores más vivos y llamativos.
- Y por supuesto que sean suaves. No vayas a elegir un peluche con tejidos o cremalleras que puedan lastimar la piel del bebé.
¿Qué beneficios tienen los peluches en los bebés?
- Un peluche permite que los niños tengan más confianza en sí mismos. Los ayuda a enfrentar los «abandonos básicos de la edad» como dormir en su propio cuarto, empezar a ir a la escuela, etcétera.
- Los peluches dan la experiencia de tacto suave. El tacto es una poderosa necesidad del ser humano que proporciona alivio del estrés, regula la presión arterial, genera endorfinas e implica un momento de paz y tranquilidad.
- Con los peluches los niños más pequeños también pueden practicar las habilidades que van aprendiendo. Por ejemplo si el niño aprende a abrocharse un botón le puede enseñar a su peluche como se hace.
- En niños de edad preescolar y primaria favorecen la reproducción de roles. A los niños les encanta “ser adultos” y “hacer lo que ellos hacen”. Y con su peluche pueden jugar a ser mayores y a cuidar de ellos.
- A través de los peluches, los niños pueden expresar emociones y pensamientos que no pueden hacer verbalmente.
- Con los peluches también pueden practicar las habilidades sociales necesarias para hacer amigos. Con ellos pueden aprender a empatizar con otros, compartir…
- Por si esto fuera poco un oso de peluche ayuda a los pequeños a desarrollar su imaginación, potenciar su creatividad y el control de sus emociones.
¿Aún tienes dudas de por qué debes poner un peluche en la vida de tu bebé?